Si bien İnci aún no ha olvidado la risa de Han en la habitación del psiquiatra, se preocupa aún más por la actitud calmada de Han. Gülben se orina en la siesta, pero esta vez toma una decisión radical. Esta decisión afecta no solo a Gülben, sino a toda la casa. Mientras Safiye intenta que Gülben renuncie a su decisión, llegan İnci y Han. Al descubrir que Neriman se encerró en su habitación se inicia una gran crisis. Neriman pone en acción su plan inesperado mientras todos en la casa están tensos y esto trae consigo problemas mayores.